El Dr. Alberto Albaladejo es Catedrático de Ortodoncia de la universidad de Salamanca (USAL) En el año 2019 se convertía en el catedrático más joven de España. Coordinador de la asignatura de ortodoncia del grado de Odontología, del máster de Ortodoncia y Ortopedia dentofacial y del diploma de especialización en Ortodoncia avanzada.
Es autor de múltiples artículos nacionales e internacionales, y tiene más 300 comunicaciones en congresos nacionales e internacionales.
Fundador y presidente de la Sociedad Universitaria española de Alineadores, ortopedia dentofacial y Ortodoncia (SUEDADO). Es el presidente del Congreso Internacional de Ortodoncia y Alineadores que se celebra cada año en Madrid, organizando sesiones paralelas para higienistas con un alto nivel científico en todas las ponencias. A día de hoy podemos decir que este Congreso se ha convertido en un referente internacional y el evento de ortodoncia con más capacidad de congregación de nuestro país y Europa. Sabemos de primera mano el trabajo, cariño y sobre todo dedicación que hay tanto por Usted como por su equipo de higienistas en la organización de cada una de las ediciones
- ¿Cómo es la ortodoncia del siglo XXI?
Actualmente estamos asistiendo a un cambio muy acentuado de la Ortodoncia. A la llegada de la baja fricción le siguió la aparición de los microtornillos y tras ellos la ortodoncia con alineadores. Todo ello está mostrando un escenario clínico donde la rutina se ha modificado drásticamente y estamos en pleno proceso de cambio y adaptación a las nuevas técnicas y tecnología.
- ¿En su opinión qué papel desempeña o debería desempeñar el higienista en el campo de la ortodoncia?
Basado en mi experiencia clínica el higienista juega un papel fundamental en el equipo que trata los casos de ortodoncia. Junto al Ortodoncista capitanea el movimiento y tratamiento de los pacientes, desarrollando un abanico amplísimo de procedimientos clínicos. Trabajar junto a un higienista bien formado e implicado con la clínica es una de las claves para poder acabar los casos con excelencia.
- La tecnología tiene cada día más protagonismo en las clínicas dentales, ¿qué avances tecnológicos se utilizan actualmente en ortodoncia?
Como bien indica las nuevas tecnologías han hecho aparición en nuestra día a día con los escáneres intraorales, CBCT, programas de trazado cefalométrico digitales, programas de gestión de la clínica en la nube, etc. Todo ello está haciendo que nuestra práctica diaria empiece a ser muy diferente a la de hace pocos años atrás. Esta implementación tan rápida que ha tenido lugar hace totalmente necesario la actualización continua tanto de los ortodoncistas como de los higienistas para poder estar al día y ofrecer los mejores medios y tratamientos.
- Con la proliferación de marcas de alineadores que omiten la figura del Ortodoncista, ¿Cuál es el futuro de la Ortodoncia?
Es un error pensar que los alineadores no necesitan a un ortodoncista plenamente formado. Actualmente no existe una ley de especialidades en nuestro país por lo que las competencias de la ortodoncista no están delimitadas. Cada vez son más los casos ya tratados con alineadores por personas sin la formación necesaria que nos llegan con grandes problemas causados. La ortodoncia necesita de una gran y larga formación que te permita realizar cualquier tipo de tratamiento, ya sea con brackets o alineadores. Todo es Ortodoncia, todo necesita una profunda formación y todo requiere una actualización continua.
- Como docente y organizador de congresos de gran importancia de ortodoncia, ¿cómo cree que debería ser la formación de los higienistas en este campo?
La formación inicial del higienista en materia de ortodoncia es muy escasa, es por ello que es necesario un complemento de formación una vez terminado para poder dominar la materia que es compleja y muy amplia. Clínica, formación y ciencia siempre deben ir de la mano, y este gremio requiere, se merece y necesita que se haga desde los más reputados profesores y profesionales. Yo me siento comprometido con vosotros, os estoy muy agradecido por la ayuda diaria que me muestran en mi clínica y universidad, así que anualmente intento darles un curso lo más digno, científico y clínico posible.
- Como investigador en múltiples proyectos, director de tesis y con cientos de publicaciones, que consejo les daría a los higienistas para que se animen a publicar.
La ciencia y la formación los son todo para el conocimiento. Las bases clínicas se deben sustentar sobre andamios científicos. Pensar, deducir y saber el porqué de las cosas nos destaca como humanos y nos debe hacer sobresalir en nuestra profesión. Hacer investigaciones, indagar sobre temas clínicos o cualquier procedimiento que lleve a una publicación enriquecerá la práctica clínica diaria, no sólo por lo aprendido de una manera objetiva, sino por todo lo que ordenará e incitará en nuestra mente de una manera más subjetiva.
- Sabemos de su pasión por los viajes, y en la revista Higienistas tenemos “El sitio de mi recreo”, ¿podría decirnos que país o ciudad del mundo le ha impresionado más? Y ¿Por qué le impresionó?
Así es, viajar es una de mis grandes pasiones. Alimenta el alma, alegra la mente y excita a los sentidos. Lo hago por todos los continentes, pero mis viajes favoritos son los étnicos. Visitar culturas que mantienen intactas sus tradiciones en medio de la pandemia, que es la globalización que nos azota me parece un privilegio al que le quedan pocos años de existencia y realidad. En este sentido mis viajes más apasionantes han sido hacer una expedición por las montañas de Papúa para visitar a los Dani, conocer en Etiopía a los impresionantes Mursi, perderme por la selva del norte de Colombia conviviendo con los Wiwa y visitar en Namibia a los Himbas. Estar delante de estas personas y observar sus culturas me retrotrae cientos de años, me ayuda a comprender nuestro mundo y me fascina observar la variedad y la riqueza cultural que, aunque como reliquias, sigue conservando nuestro mundo.