Tengo muchos “sitios de mi recreo”, soy una viajera vocacional. Si tuviera que elegir un solo sitito me costaría bastante. Así que os voy hablar de uno de mis últimos descubrimientos, y digo descubrimiento porque no había estado anteriormente en estos parajes. Es una zona que tuve la suerte de poder explorar en el puente de todos los santos: La Sierra de Francia. Esta zona se encuentra en el sur de la provincia de Salamanca.
El nombre de la zona ya es singular, ¿no os parece? Sierra de Francia y no estamos en ese país. Pues se denomina así porque durante la Edad Media, el rey Alfonso IX de León (1171-1230) llevó a cabo la repoblación de la comarca para reforzar la frontera sur del reino. La repoblación se hizo con colonos traídos del Norte de la península, pero también de Francia. Es por esta razón por la que a esta serranía se la conoce como Sierra de Francia y por ello existen en ella algunos topónimos de influencia o apellidos franceses, como Bernal o Gascón. (Información sacada de Wikipedia)
Todos los pueblos que aparecen en el mapa merecen una visita, estoy segura. Yo os voy a contar unas pinceladas de algunos de los que visitamos. Esta zona tiene mucho que ver y que contar. Necesitaríamos muchas páginas…….
Nuestro alojamiento lo teníamos en San Miguel de Robledo. Un pequeño y tranquilo pueblo, rodeado de castaños y robles. Que en otoño es un regalo para la vista. Bueno y para saborear las castañas de la zona.
Desde la ventana de nuestra habitación podíamos ver otro pueblo muy recomendable: San Martín del Castañar
Como veis por la foto, tierra de vinos también. Tienen una variedad de uva muy interesante, el rufete.
La arquitectura tradicional de la zona, piedra, ladrillo, adobe y madera está muy conservada.
Además, cuenta con un atractivo para los amantes del senderismo, una ruta circular conocida como “El Camino de los Espejos”. A lo largo de este camino, que une localidades como Sequeros, Casas del Conde y San Martin del Castañar, se puede disfrutar de unos bellos rincones naturales y piezas que combinan arte y naturaleza.
En San Martin del Castañar, tuvimos la suerte de disfrutar de la fiesta de la castaña (y de sus gentes). En esta época y con tantos castaños no me extraña que hagan una fiesta.
Mogarraz, otro pueblo con mucho encanto, en pleno corazón de la Sierra de Francia, dentro del Parque Natural de las Batuecas. Declarado Conjunto Histórico-Artístico por su patrimonio artístico y cultural.
Pasear por sus estrechas calles es encontrarse con casas medievales y típicas construcciones serranas.
Desde hace unos años en las fachadas de las casas se puede disfrutar de un hermoso proyecto de Florencio Maíllo, profesor de la Universidad de Salamanca en Bellas Artes: retratos pintados sobre planchas de latón. Estos retratos están hechos a partir de los negativos encontrado en la casa de un fotógrafo del pueblo. Los negativos eran de las fotografías que en 1967 se hicieron los habitantes del pueblo para renovar su DNI. ¡Es disfrutar viendo una exposición al aire libre!
Muy recomendable la gastronomía de la zona desde luego. Y ya que estamos en Mogarraz, si os queréis ir con un buen sabor de boca, os aconsejo comer en Restaurante Mirasierra. A mi me lo recomendaron y fue todo un acierto para descubrir la cocina local. https://www.restaurantemirasierra.com/
Justo detrás del restaurante está bodegas La Zorra. Para probar vinos con denominación de origen Sierra de Salamanca. https://www.vinoslazorra.es/
Y por supuesto uno no se puede ir de allí sin probar o llevarse los exquisitos embutidos ibéricos que se producen en la zona.
Escribiendo estas líneas vuelvo a viajar, mi memoria se llena de imágenes, sonidos y sabores que sólo se pueden descubrir allí. Por eso os puedo decir que esta zona bien merece un viaje.
